Agencias

Napolitano pide aprobación del Dream Act en nombre de la seguridad

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Washington D.C., 2 de diciembre. La aprobación de una reforma migratoria que beneficiaría a los jóvenes que llegaron a Estados Unidos como menores indocumentados beneficiaría a la seguridad del país, aseguró este jueves la secretaria de Seguridad Interna, Janet Napolitano.

El Congreso estadounidense estudia una ley denominada Dream Act, que daría papeles a aquellos jóvenes indocumentados que tengan un buen historial académico y social y que desean entrar en la Universidad o quieren enrolarse en las Fuerzas Armadas.

“Es importante destacar que el Dream Act se enmarca dentro de una estrategia más amplia de control migratorio”, aseguró Napolitano a los periodistas.

Estados Unidos está batiendo récords de detención y deportación de criminales extranjeros sin papeles, recordó Napolitano. Un total de 195.000 criminales indocumentados fueron deportados en el año fiscal 2010 (octubre 2009-septiembre 2010), un 17% más que el periodo anterior, recordó Napolitano.

Abrirles la posibilidad de obtener residencia legal a estudiantes que llegaron al país acompañando a sus padres “nos permitirá priorizar” la lucha contra la inmigración ilegal, explicó la secretaria.

El Dream Act “no substituye obviamente la necesidad de una reforma migratoria integral”, añadió. La ley, cuyas primeras versiones fueron debatidas en el Congreso estadounidense hace una década, es defendida por la mayoría demócrata saliente tras las elecciones del 2 de noviembre.

Sus líderes en el Congreso, Harry Reid en el Senado y Nancy Pelosi en la Cámara de Representantes, han anunciado su intención de presentar el proyecto para votación final en breve, aprovechando que aún tienen la mayoría.

El forcejeo en torno a esta ley, que cuenta con escasas probabilidades de ser aprobada, condujo a los demócratas a introducir una nueva versión más estricta, en términos de límites de edad, este mismo miércoles.

Esa última versión debería satisfacer a los republicanos, consideró Napolitano. El Dream Act podría beneficiar a unos 50.000 estudiantes indocumentados cada año, según cálculos del Departamento de Educación.

Pero los republicanos volvieron este jueves a dar prueba de inflexibilidad. “Lo que quiere el pueblo estadounidense es alejar la posibilidad de un aumento de los impuestos y recortar gasto, esa debería ser la prioridad”, advirtió el líder de la bancada opositora en la Cámara de Representantes, John Boehner.

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