Rinden honores póstumos a agente fronterizo asesinado

Washington D.C., 23 de diciembre. La secretaria de Seguridad Nacional se comprometió el miércoles a buscar una “justicia rápida” para los delincuentes que se enfrentaron a tiros con agentes fronterizos y que provocaron la muerte del elemento Brian Terry.

Janet Napolitano, la funcionaria gubernamental de más alto nivel en asistir al funeral de Terry en el templo Greater Grace de Detroit, lo describió como un agente excepcional que se preocupaba profundamente por sus colegas.

“Puso el servicio por encima de sí mismo, lo que es la marca del heroísmo”, dijo Napolitano a sus familiares y a decenas de elementos de seguridad de diferentes corporaciones de todo el país y de la vecina Canadá.

El agente de 40 años sufrió una herida mortal cuando daba seguimiento a una pandilla del crimen organizado el 14 de diciembre en un cañón de Arizona, justo al norte de la frontera con México. Cuatro delincuentes fueron arrestados y otros están prófugos.

Napolitano había dicho poco después de enterarse de la muerte de Terry que los delincuentes rastreados por su equipo eran pandilleros que suelen robar a los inmigrantes ilegales o a los contrabandistas de indocumentados que buscan ingresar a Estados Unidos.

“Decidimos… decidí buscar una justicia rápida para los responsables de esta muerte”, dijo Napolitano.

Terry se integró a la Infantería de Marina poco después de graduarse de la secundaria Flat Rock en 1988. Después de sus tres años en el ejército participó con los departamentos de policía de Ecorse y de Lincoln Park, a las afueras de Detroit.

Terry, integrante de la Unidad Táctica de la Patrulla Fronteriza, un grupo de elite, alguna vez escribió que no le temía a la muerte “porque había estado demasiado cerca de ella en varias ocasiones”.

Su único temor era perder el honor, leyó el sargento de la Policía del Estado de Michigan, Dan Bowman, a partir de algunas notas que Terry escribió sobre sí mismo. En esos textos, Terry indicó que prefería “morir peleando a que se diga que no tuve el valor (de hacerlo)”.

El Departamento de Justicia, el FBI y las autoridades mexicanas están trabajando de manera conjunta para erradicar al resto de la pandilla que participó en el ataque, informó el comisionado de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, Alan Bersin.

“La gente que lo asesinó será llevada ante la justicia. No tengan ninguna duda de ello. Podrán correr, pero no esconderse”, dijo Bersin durante el funeral del miércoles.

by Agencias