Denver, Colorado, 23 de junio. Lorenza Álvarez, una ciudadana estadounidense, denunció que su esposo y su cuñado fueron arrestados por agentes de Inmigración el domingo pasado en un parque de Colorado, cuando los hombres participaban con sus hijos de un festival local.Álvarez dijo a través de su abogado que su esposo, Julio, y su cuñado, César, fueron a celebrar el Día del Padre con sus respectivos hijos al Festival de las Fresas en Glenwood Springs, en el oeste de Colorado.

Mientras los niños jugaban, dos alguaciles del condado Garfield se acercaron a los hombres y los escoltaron hasta donde los esperaban dos agentes de inmigración, vestidos de civil.

Los agentes del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) arrestaron a los hermanos Álvarez, que aunque indocumentados no tenían órdenes de arresto en su contra, y los encerraron dentro de una camioneta de la agencia federal estacionada cerca del parque.

Los cuatro niños que cuidaban los Álvarez quedaron solos hasta la llegada de su madre y su tía.

Lorenza Álvarez, embarazada de 7 meses, se acercó entonces a los agentes y explicó que César era el único responsable por el cuidado de sus mellizas de 11 años. Tras una larga conversación, César quedó en libertad, pero Julio fue trasladado al centro de detención de ICE en Colorado Springs.

Según el abogado Ted Hess, que representa a los hombres, la situación afectó tanto a Lorenza Álvarez que la mujer debió ser trasladada de urgencia a un hospital de la zona.

“No se me ocurre ninguna manera mejor de arruinar las relaciones de la policía con la comunidad local que pedir que la policía recorra un parque buscando a trabajadores indocumentados durante eventos como el Día de las Fresas”, dijo Hess.

“Se trata de una intolerable alianza entre ICE y la policía local que destruye la confianza entre la comunidad y la policía”, agregó.

De hecho, según Brendan Greene, coordinador de la Coalición de Colorado por los Derechos de los Inmigrantes (CIRC, en inglés) para las Montañas Rocosas, una vez que se corrió la voz del arresto de los hermanos Alvarez, el parque donde se realizaba el festival quedó “casi desierto”, debido a que las familias hispanas dejaron el lugar.

“Este operativo ha revelado que la oficina de ICE en Glenwood Springs opera al margen de las claras directivas de ICE de no realizar operaciones en ‘lugares sensibles'”, dijo Greene.

Greene calificó de “irresponsable” el accionar de las autoridades por “haber arruinado los festivales de verano” en toda la zona. EFE fm/cs